Un año más, y ya van tres, la Juventud Cofrade de la Hermandad de la Amargura coloca en los aledaños de la Ermita de Nuestra Señora del Robledo unos mostradores en los que ofrecemos el desayuno para los fieles que acuden a la Misa de nuestra Patrona.
Llegamos al Robledo a las seis de la mañana para poder contemplar la bella y emocionante salida de la Virgen de su Ermita hasta el lugar donde preside la Misa. Una vez acabado el traslado, comenzamos a montar nuestro puesto, a colocar todos los dulces en las mesas y a organizar lo que iba a ser una mañana de lo más ajetreada. Unos al mando de los fogones y otros encargados de los pasteles, fuimos atendiendo a todos nuestros “clientes” para que se quedaran satisfechos.
El resultado: una mañana muy agradable en la que todos echamos una mano para conseguir nuestros objetivos. Claro está que no debemos olvidar el dar las gracias a todos los que se acercaron a nuestro puesto para desayunar así como a nuestras madres, quienes se encargaron, en muchos casos, de prepararnos los bizcochos, roscos, palos de vinagre, etc. Tampoco nos podemos olvidar de Juan García, nuestro Prioste, quien de nuevo, nos prestó sus tablones y borriquetas para hacer los mostradores. Y como no, estamos eternamente agradecimos a la Hermandad de la Virgen del Robledo, quien cada año, nos da su permiso para colocar en el campo nuestro “chiringuito de desayunos”.
Beatriz Cobo Rossell
Constantina, 9 de agosto de 2010
No hay comentarios:
Publicar un comentario