El acto se inició con la presentación y saluda de nuestro Hermano Mayor, el que, seguidamente, pasó la palabra a la fiscal de juventud, Beatriz Cobo Rossell, la que leyó a voz plena una carta dirigida a nuestras monjitas en la que le agradecíamos su ayuda desinteresada. Acto seguido, el presidente, Andrés Manuel Marín Méndez, pasó a leer una serie de peticiones dedicadas a las Hermanas, al Grupo Joven, a la Hermandad, a la infancia difícil y al pueblo de Constantina. A continuación, fueron las hermanas las que tomaron las riendas de la celebración, pasando a la lectura del Evangelio y una posterior reflexión de la Palabra de Dios. Tras el momento de calma, de pie, enlazados en señal de hermandad, procedimos al rezo de un Padre Nuestro y Ave María,
Para concluir la celebración, le hicimos entrega de un cuadro de Nuestra Señora de la Amargura, en el que rezaba un texto de agradecimiento.
Con este sencillo acto lo único que queríamos agradecer su labor ejercida y afianzar los lazos que unen a nuestra Hermandad con el Colegio-convento de las Hermanas de la Doctrina Cristiana que en su día albergara las sagradas tallas de Nuestros Amantísimos Titulares.
NOTA 1: En la sección “Informes” podréis visualizar una reproducción de la carta que le entregamos, así como de las peticiones formuladas.
NOTA 2: En breves, en la sección “Momentos Inmortalizados” podréis ver una sección de fotografías sobre el acto.
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